La Rioja
, de la misma forma que el resto de los territorios europeos, debe trabajar por alcanzar y fomentar políticas y prácticas que se comprometan en la reducción de emisiones. En este sentido, la región debe dirigirse a una economía baja en carbono basada en tres elementos esenciales: asignación de precio al carbono, política tecnológica y la eliminación de barreras para el cambio de comportamiento.


La Rioja, dentro de sus competencias dentro del Estado Español, debe hacer propio el objetivo de limitar en un 37% las emisiones del sector difuso con el fin de cumplir y contribuir al cumplimiento del Protocolo de Kyoto. Por ello se aprueba la Estrategia de Lucha contra el Cambio Climático en La Rioja 2008-2012 que plantea 72 medidas a seguir en 8 áreas diferentes, todas ellas, encaminadas a reducir las emisiones, mejorar la calidad de vida y concienciar a los diferentes sectores de la población sobre el problema.


En la Comunidad Autónoma de La Rioja, la Comisión delegada del Gobierno Contra el Cambio Climático, creada en octubre de 2007 y formada por responsables de las Consejerías de Presidencia; Turismo, Medio Ambiente y Política Territorial; Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural; Salud e Industria, Innovación y Empleo, es el órgano colegiado encargado de coordinar las diferentes políticas del Gobierno regional relacionadas con el tratamiento e impacto derivados del cambio climático.