Es importante aprovechar cada una de las oportunidades en las que se comparte tiempo en familia para que cada miembro tenga su espacio y exprese sus opiniones, historias, vivencias, ideas e impresiones acerca de temas que les parezcan interesantes. La hora del almuerzo y la cena son ideales para establecer estas conversaciones fluidas.
Debemos intentar dejar la tecnología a un lado mientras estamos conversando y mirarnos a los ojos, observar el lenguaje corporal de nuestros hijos, sus expresiones…
Mostrar interés sobre las cosas que le gustan a los demás, es una muy buena forma de acercarnos a los miembros de nuestra familia, cuáles son sus preocupaciones, cómo les ha ido el día, cómo se sienten… son formas de mostrar interés.
Y por supuesto pasar tiempo de ocio en familia disfrutando de alguna actividad simple, como jugar juegos de mesa o ver una película siempre ayuda a crear unión entre el núcleo.